El doctor Mario Poot Pech, responsable del control de langostas en Yucatán, informó que en lo que va del año se han intervenido más de 40 mangas de estos insectos en el estado. Destacó que en enero se controlaron 44 mangas, mientras que en febrero ya se han registrado tres, especialmente en la zona Oriente. Explicó que este trabajo requiere paciencia y precisión, ya que los vientos han desviado algunas mangas hacia áreas urbanas, como ocurrió recientemente en Mérida.
La presencia de langostas en la región es un fenómeno recurrente, aunque su intensidad varía cada año. Según Poot Pech, se trata de una plaga cíclica que experimenta picos de proliferación cada cuatro o cinco años, lo que explica la notoriedad de su presencia en 2025. Comparó la situación actual con la de 2021, cuando también se observaron mangas en la ciudad, a diferencia de 2020, año en el que las tormentas tropicales Amanda y Gamma, así como los huracanes Delta y Zeta, influyeron en la dinámica de la plaga.
El especialista resaltó que, en 2023, Yucatán fue sede del Congreso Internacional de Orthopterología, el cual reunió a 180 expertos de 22 países en un hotel de Paseo de Montejo. Este evento permitió actualizar información sobre el control y prevención de langostas y chapulines, lo que ha sido clave para enfrentar la plaga en la actualidad. Aseguró que el intercambio de conocimientos durante el congreso ayudó a optimizar las estrategias de monitoreo y control.
Como parte de estos avances, se han implementado tecnologías como drones y el uso de imágenes satelitales para analizar patrones climáticos y anticipar futuras proliferaciones de langostas. Según explicó Poot Pech, estas herramientas permiten identificar áreas con mayor y menor precipitación, así como zonas propensas a la sequía, lo que ayuda a predecir dónde podrían surgir nuevas generaciones de la plaga.
Finalmente, adelantó que el próximo Congreso Internacional de Orthopterología se llevará a cabo en 2026 y tendrá como sede la región de la Patagonia, en Argentina. Este evento, que se celebra cada tres años, continuará fortaleciendo la cooperación internacional en la investigación y control de langostas, una plaga que representa una amenaza constante para el sector agropecuario en diversas partes del mundo.