El Aeropuerto Internacional de Cancún reafirma su papel como una de las terminales más relevantes del país y del Caribe, al consolidarse como la segunda más importante de México por volumen de pasajeros. Entre enero y octubre, la terminal movilizó más de 24 millones de viajeros, una cifra que refleja el peso turístico de Cancún y su posición como el destino internacional más representativo del país.
Este liderazgo, no obstante, se presenta en un contexto complejo para la aviación nacional. A pesar de que la mayoría de los aeropuertos del país registraron crecimientos significativos en el tráfico aéreo, Cancún mostró una ligera disminución anual de 3.8 por ciento en el número de pasajeros. Esta variación contrasta con el desempeño positivo de otras terminales y coloca al aeropuerto caribeño entre los pocos del Top 10 que reportaron retrocesos.
La desaceleración observada no modifica su posición estratégica dentro del sistema aeroportuario mexicano, pero sí abre un espacio para el análisis sobre las dinámicas actuales del turismo internacional. Factores como la reconfiguración de rutas aéreas, la competencia con otros destinos del Caribe y los cambios en los hábitos de viaje de mercados clave comienzan a influir en el comportamiento del tráfico hacia Quintana Roo.
Aun con esta baja, el Aeropuerto de Cancún continúa siendo determinante para la economía nacional. Los datos del sector indican que esta terminal concentra más de un tercio del tráfico turístico internacional que llega a México, superando con amplitud a aeropuertos como Guadalajara, Monterrey, Tijuana y Los Cabos, que también figuran entre los más transitados del país.
La infraestructura aérea desarrollada en Cancún le ha permitido responder a escenarios de alta demanda, periodos de ajuste y transformaciones del mercado turístico global. Su capacidad operativa ha sido clave para sostener la actividad económica vinculada al turismo, un sector que genera cientos de miles de empleos y una aportación relevante al producto interno bruto nacional.
Sin embargo, el ligero retroceso registrado en el flujo de pasajeros plantea la necesidad de reforzar estrategias de conectividad, diversificar mercados emisores y fortalecer la experiencia del viajero. La competencia con otros destinos del Caribe se ha intensificado, lo que obliga a mantener una promoción constante y una oferta turística atractiva para conservar el liderazgo regional.
A pesar de estos desafíos, el Aeropuerto Internacional de Cancún sigue siendo la principal puerta de entrada al Caribe mexicano y un pilar fundamental para entender el desarrollo turístico de México, confirmando que su relevancia trasciende las variaciones coyunturales del mercado aéreo.
